Para educar se necesita tener sentido de pertenencia con el lugar, inculcar en los estudiantes el Amor por lo que hacen y sí se trata de ecología se debe profundizar en herramientas
que permitan la ambientación digna de espacios escolares, donde lo verde sea predominante y que en las aulas de clase se aborden temas relacionados con la conservación ambiental, para crear en los jóvenes
conciencia por el mundo, pero principalmente por su entorno en el que desenvuelven diariamente.
Ecoeducar es sencillamente sembrar para la vida, para tener ambientes sanos, donde se respire aire limpio y también la institución tengas áreas verdes dignas, salones
en buen estado y murales que agraden a la vista y permita todo esto que el estudio no sea algo obligado para el estudiante, sino que le guste ir al liceo a aprender y tenga ambientes que lo motiven. La Ecoeducación
no sólo es hablar del ambiente, de simples teorías, sino de prácticas reales que incentiven al estudiante a participar comunitariamente, que se involucre en la transformación de espacios y también
pueda realizar diversas actividades con sentido ecológico con materiales de provecho. De igual manera Ecoeducar abarca los Trabajos de Campo que son actividades donde se promueve la conservación ambiental viajando
por Venezuela con sentido ecológico, con propuestas y acciones con las comunidades que se visitan, también apreciar paisajes y dejar los espacios mucho mejor de lo que se encontraban y sí están
en óptimas condiciones preservarlos y enseñar para construir y no destruir.
La Ecoeducación requiere de estudiantes críticos, que tengan arraigo a lo propio y espíritu de crear y ser defensores ambientales para tener un liceo limpio, en óptimas
condiciones y esto conlleve a dignificar el sentido educativo, que no sea el repetir lo mismo de los textos, sino llevar a la práctica esos conocimientos y no se quede en caletre, en memorización que no deja
enseñanza.
En la Ecoeducación el docente es el pilar fundamental para que el arraigo a lo propio pueda nacer, porque sí existen docentes apáticos no se puede exigir a un estudiante
que no lo sea, es enseñar con el ejemplo y no por simple sentido económico. Es necesario involucrarse al 100% con el entorno y no perder de vista el sentido ambiental porque de ahí depende todo con las
fuentes principales como el agua, el aire y las plantas que son esenciales para la vida y de ahí parte la Ecoeducación para sembrar en el estudiante de la U.E.N. VILLA DE CURA ese Amor por lo que hace, una enseñanza
para la vida no sólo para el ahora.
La realización de murales en el liceo, la siembra de plantas y los Trabajos de Campos a diversos destinos de Venezuela constituyen la Ecoeducación porque son actividades centradas
en proporcionar al estudiante herramientas para la vida, pintar y dibujar para cambiar ambientes en mal estado, sembrar plantas para respirar aires más puros y tener áreas verdes que permitan el esparcimiento.
